Antes de lanzarme al campo y anotar la primera observación, creo conveniente presentaros el equipo que utilizo, que como podreís observar es muy sencillo y barato.
En primer lugar y el más importante de todos, los ojos. Solo a simple vista pueden observarse unas 6000 estrellas, para ello es importante destacar que tiene que haber unas buenas condiciones del cielo y también que los ojos necesitan adaptarse a la oscuridad (unos 30 minutos). Apuntar también que, si necesitamos algún tipo de iluminación durante la observación es importante que sea una luz roja, ya que es la que menos desacostumbra la vista a la oscuridad
Para orientarnos entre esa gran cantidad de estrellas, podemos usar un planisferio celeste, aquí pongo el que yo utilizo. Un recortable de papel que me viene muy bien porque así puedo escribir y dibujar cosas en él. Normalmente antes de salir a observar el cielo acostumbro a utilizar una aplicacion en el ordenador llamada stellarium para hacerme una idea de que me voy a encontrar y añadir notas a mi planisferio.
Continuamos ahora con el telescopio. No es que sea un elemento imprescindible, el cielo puede observarse a simple vista durante mucho tiempo, sin por ello dejar de descubrir cosas nuevas. Pero me decidí a comprar uno debido a la celebración del Año Internacional de la Astronomía. En el que, coincidiendo con el 400 aniversario de que Galileo apuntara el primer telescopio hacia el cielo, se decidió crear un kit de bajo coste para montar el Galileoscope, un telescopio refractor de 50mm de diámetro de objetivo y 500mm de distancia focal, con un ocular de 25 aumentos y que junto con una lente barlow alcanza los 50 aumentos. Un equipo realmente básico pero que me esta dando muchas satisfacciones.
Y por último, un telescopio necesita una base firme para en la que sostenerlo, en mi caso un tripode de fotografía sencillo desempeña el papel de sujetar el telescopio.
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